lunes, 22 de septiembre de 2014

¡Mi bebé me muerde! (y eso nos ha unido más)

No le están saliendo los dientes, esa etapa hace meses que la superó, sólo le faltan los últimos molares y esos salen sobre los 2 años, según tengo entendido.

De repente le da por morder, y no son mordisquitos, no, agarra bien fuerte con los dientes y aprieta más y más hasta que conseguimos que nos suelte, después de chillar de dolor y separarle intentando que abra la boca. Nos ha llenado todo el cuerpo de moratones a mi marido y a mí, en brazos, piernas, manos, cara, hombros... lo que encuentre a su alcance cuando le da por morder.

Muerde cuando está muy contento y alterado y muerde también cuando se cabrea (ambas situaciones se dan muy a menudo y puede pasar de un estado a otro en segundos). Pierde el control, se acerca con la boca abierta e hinca los dientes.

Llevaba unos días así y nosotros no sabíamos qué hacer, se acercaba con la intención y le decíamos seriamente "¡No muerdas!". Mientras nos mordía, además de chillar de dolor, se lo repetíamos y le pedíamos que nos soltase. En cuanto nos soltaba le dábamos un pequeño toque en la boca, para que se diese cuenta de que lo que hacía estaba mal y después de eso le explicábamos "¡Mordiscos no!, lo que tienes que hacer es darnos besitos", "dame un beso en el brazo donde me has mordido que me duele mucho"... él nos daba uno o varios besitos y nosotros sonreíamos y le perdonábamos.

Siempre ha sido muy reticente a besarnos, nos besa poco, casi siempre se lo teníamos que pedir y muchas veces se negaba a hacerlo, pero en esta ocasión sabía que había hecho algo mal y se disculpaba de esa manera.
Mua
Al rato volvía a exaltarse, es un terremoto y no para, salta, grita, corre, pega... y ¡muerde!, uffff ¡otra vez igual!. Mismo discurso cada vez que lo hacía, primero intentando evitarlo (no nos da tiempo a apartarnos, si nos diese tiempo no tendríamos tantos moratones), luego le soltamos (parece un perro de presa) y le pedimos el beso de disculpas.

Así un día tras otro, hasta que empezó a controlarse... se acercaba a nosotros con la intención de morder, pero se paraba cuando sus dientes tocaban nuestra piel y nos daba un besito, "Así sí, los besos sí que nos gustan". Es increíble, aunque perdía el control e iba hacia nosotros con la intención de morder, conseguía recuperar el control y transformar ese mordisco en un beso.

Poco a poco se le han ido pasando esos prontos de mordiscos y ahora cada vez que se acerca a nosotros es para darnos un beso. Cuando jugamos, aunque no esté exaltado, se acerca despacito con sus morritos preparados, nos mira y nos besa. Nos agarra las manos se las acerca a la boca y nos besa. A veces incluso se detiene delante de nosotros para que también pongamos nuestros morritos y nos da un beso en los labios.

Ha interiorizado tanto lo de los besos que ahora incluso estando dormido nos los da. Duerme pegado a mí, agarradito a mi brazo, cuando se acerca más mi brazo a su cara se oyen los besitos que me da en la oscuridad... y yo me derrito.

¿Habéis pasado por ésta fase mordedora de vuestros peques?
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6 comentarios:

  1. En mi caso, si que me han dado algún mordisco, pero solo cuando estaban rabiosos con los dientes.
    Pero mira, ahora tiene lo bueno que expresa su cariño con besos.
    Un beso

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    1. Lo de los besos ha sido un gran cambio, de no besarnos nunca a besarnos todos los días, ¡qué majico!.

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  2. Creo que esta es de las únicas cosas que me he perdido. Mis hijos no han pasado por eso. Asi que algo de lo que me libro.
    Un besito

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    1. Es que mi peque es muy efusivo, cuando le salieron los dientes también me mordía pero de otra manera y también tuvo su fase de morder el pecho y de pellizcar y clavar las uñas... Creo que ha pasado por todas las fases agresivas, este peque va a acabar con nosotros.

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    2. Si esa si la de clavar las uñas esa si la he pasado y sigo pasando junto al te doy patadas y me pongo como una bestia cuando no se me cuadra algo. Madre mía es desesperante.

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    3. Yo con las uñas estaba tan desesperada que me compré unos guantes largos para usar mientras daba el pecho. Así, como él no notaba la carne, ya no le hacía gracia el clavarme las uñas y con el tiempo dejo de hacerlo :P

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